El P. Jorge Cortés, misionero del IVE en Irak, fue recibido, junto al P. Carlos Walker, superior general del IVE, en audiencia privada por el Santo Padre Francisco el sábado 15 de noviembre.
El P. Jorge así relató el encuentro:
El Papa nos recibió de pie, muy cerquita de la puerta por la cual habíamos ingresado. Después de que nosotros hiciésemos genuflexión y besáramos su anillo, agradeció la labor que estamos haciendo en Irak. Yo le dije que los agradecidos éramos nosotros, le agradecíamos su preocupación e interés en la búsqueda de la paz, y sus exhortaciones. Me preguntó por los peligros, le respondí que en toda misión había peligros y que en Irak se agregaba el hecho de la guerra. Dijo que esa misma mañana había estado el obispo de Mosul. Le preguntó al padre Walker cuántos novicios había, y el Padre le respondió que eran unos 80. El Papa le preguntó cuántos sacerdotes de la Congregación estaban en Medio Oriente y Egipto y el Padre le fue nombrando por países la cantidad; entonces el Papa dijo: “¡sigan adelante!!!… y a no aflojar!!”. Luego el P. Walker agregó que nosotros habíamos pedido expresamente por escrito quedarnos allí por la gente, no obstante todos los peligros, ante lo cual el Papa, por segunda vez nos agradeció. Después se dio vuelta para que le alcanzaran un Rosario, me lo puso en la mano y la estrechó fuertemente diciendo: “que Dios los bendiga”.
.
El p. Jorge pudo saludarlo además en la audiencia del miércoles 19 de noviembre.
Presentamos la noticia aparecida en L´Osservatore Romano, edición italiana, del 20 de noviembre de 2014.
El grito de dolor de los cristianos perseguidos
Cristianos que huyen de la violencia de los fundamentalistas, familias enteras que ya no tienen nada, obligadas a abandonar sus casas y posesiones para salvar la vida. Ha contado al Papa hechos dramáticos el vicario de la arquidiócesis latina de Bagdad, el P. Jorge Cortés, del Instituto del Verbo Encarnado. De Irak, donde se encuentra desde el año 2010, ha venido a agradecer a Francisco por su apoyo y sus oraciones por la paz y por los cristianos perseguidos, en particular los de Medio Oriente. El religioso, de origen argentino, ha explicado que una emergencia ahora es la de recibir a las familias que llegan a la capital. Actualmente son 500 los núcleos familiares alojados en escuelas: más de 80 están alojadas en la de los padres carmelitas, mientras que las demás están divididas entre institutos y casas particulares. La situación sin embargo es insostenible porque les falta todo. Poseen solo la ropa que vestían en el momento de su huída.
También para las 120 familias latinas registradas en Bagdad el momento no es fácil. Cada semana, ha dicho el P. Cortés, al menos unos 15 católicos dejan el país y este éxodo no disminuye. Han llegado también pedidos de ayuda de parte de católicos que viven en el norte del país, en particular de las ciudades de Duhok y Arbil, donde el rígido clima es una dura prueba para los refugiados que sin alojamiento ni víveres deben afrontar el frío y la nieve (…)